viernes, 30 de noviembre de 2007

VENTANA SECRETA


Visto por Emy Rainey, esposa del protagonista.


Desde aquí todo se ve claro y nuestra historia, nuestra vida ya es cosa del pasado.

Hace diez años cuando me casé contigo pensé que iba a ser para siempre, que seriamos uno solo para enfrentar la vida. Pero con el paso de los años y tras la perdida de nuestro hijo, me di cuenta que tu mundo dejé de ser yo, para que empezaran a serlo los libros. No quiero escudarme en esto, se que hice mal al fijarme en otro hombre, pero me sentía sola, abandonada y por más que trate de arreglar nuestra relación, tu vivías frente a un computador escribiendo horas y horas, según tu para asegurarnos un futuro mejor.

La noche en que me viste en ese motel de carretera, sentí vergüenza, ira y mil cosas más. Esa noche todo cambio, todo el amor que sentíamos se esfumo. Parecía que quisieras matarnos y no te culpo, para nadie es fácil encontrar a su mujer en la cama con otro hombre.

Más de seis meses han pasado desde esa fecha, y cada día que pasa me pregunto como estarás.

Fuiste y serás siendo una persona importante en mi vida, te quiero, es más creo que a pesar de todo lo sucedido aun continuo amándote.

Recuerdo ese día, desperté con un mal presentimiento, por eso decidí llamarte. Aun que me dijiste que te encontrabas bien, en el fondo sabía que algo andaba mal.

Luego y para colmo de males, nuestra casa se incendio. Aunque no se si decir ¨nuestra casa¨ por que yo, ya la compartía con Tedd. En ese momento supe que mi presentimiento era verdadero y que había algo que te agobiaba.

Cuando me contaste lo de aquel hombre, lo del supuesto plagio que hiciste a la novela de Shooter, no sabia si creerte o no, pues en una ocasión copiaste una historia. Pero tus palabras se escuchaban tan sinceras que mi corazón me obligó a creerte.

Después de esto, tuve una discusión con Tedd y me hizo entender que no podíamos seguir, sino me separaba de ti. Tomé el teléfono y te llame, y como siempre, nuestra conversación no fue muy amena y más aun si el tema a tratar era nuestro divorcio.

No tuve mas remedio que irte a buscar a la cabaña, la cual había sido tu refugio por los últimos seis meses. Cogí los documentos del divorcio y salí para tu casa.

Cuando llegué la casa estaba totalmente destrozada, las sillas rotas e infinidad de papeles en el suelo. Cuando te vi, eras otra persona. No eras el mismo Mort que conocí, no eras el mismo Mort del que en algún tiempo estuve enamorada. Algo te hacia ver diferente, creo que ese sombrero era la causa de tu desgracia, desgracia que ahora entiendo. Hablabas con un acento extraño, diciendo que eras Shooter un vaquero de Mississippi. Yo consternada no sabia que estaba ocurriendo ni cuales eran tus intenciones. Hasta que vi en tus ojos, una mirada perversa. Corrí hasta el patio trasero, huyendo de ti, llevabas un desarmador el cual con frialdad clavaste en mi pierna. Luego escuche la voz de Tedd, creo que fue a buscarme por que presentía algo malo. Y tú con esa misma frialdad lo golpeaste con una pala en la cabeza, ese fue su final. Inmediatamente y si darme tiempo a reaccionar, levantaste una roca y la lanzaste sobre mi.

Por eso ahora me encuentro aquí, en un lugar donde ya tu demencia no puede tocarme.

FIN

No hay comentarios: